Si tuviste una vez dengue, te tenés que cuidar mucho más para no reinfectarte. Es el consejo que escuchamos una y otra vez. ¿Qué es lo que pasa en nuestro cuerpo cuando nos enfermamos dos veces? ¿Qué posibilidades hay de desarrollar dengue grave? Le preguntamos al infectólogo Juan Manuel Núñez, del hospital Padilla. “Las reinfecciones por diferentes serotipos no siempre ocasionan dengue grave, pero sí son más frecuentes”, aclara, y recuerda que hay cuatro serotipos de dengue.
"Tuve dos veces dengue y esto es lo que aprendí"“Si me infecto la primera vez con DEN 1, por ejemplo, voy a tener una inmunidad inicial de un año para todos los tipos de dengue. Luego, bajan los niveles de anticuerpos y me quedo con inmunidad permanente sólo contra la posible reinfección del serotipo que tuve y no contra los otros tres”, explica.
Si luego de ese año nos infectamos con un serotipo diferente ya hay un factor de riesgo para desarrollar las formas graves de la enfermedad. Otros factores de riesgo son la edad, la genética de la persona y su nutrición, resalta.
En una entrevista con LA GACETA, Gregory Poland, experto en enfermedades infecciosas de Mayo Clinic, de EEUU, explicó lo que ocurre en una segunda infección: “si te infectaste con el serotipo 1 y luego con el 2, tu cuerpo piensa que es el 1. Por lo tanto, produce anticuerpos contra el serotipo 1, que no protegen contra el 2. A través de una variedad de mecanismos, ese anticuerpo facilita la entrada del virus en sus propias células agravando la enfermedad”.
En cualquier caso se puede desarrollar dengue grave, aclara Núñez. Hoy la enfermedad se distingue así: dengue sin signos de alarma (fiebre y presencia de casos similares en el entorno); dengue con signos de alarma (dolor abdominal intenso y continuo, vómito, acumulación de líquido, sangrado de mucosas, alteración del estado de conciencia y otros indicadores); y dengue grave (dificultad respiratoria, sangrado, acumulación de líquido, afecciones al hígado, cerebro, corazón u otros órganos).
En muchos procesos de causa viral, como dengue e influenza, con muchas manifestaciones de dolor y lesiones musculares, el proceso de recuperación puede durar incluso más de un mes, detalla.